Quiero afilar mi gubia con aquella rubia.
Nos distanciamos en la verbena.
Por ella, me cortaría las venas,
adornaría su diadema;
por ella robaría a la reina su corona.
Su cuerpo de guitarra tocaría bien mi armónica;
de forma rústica, me tocarías la trompeta,
entonarías cantos de sirena.
Quiero afilar mi gubia con aquella rubia,
grabar en su madera el alba,
como grabar en la tabla mis recuerdos del alma.
Transferir en lienzos los rasgos efímeros de sus besos,
las caricias frías, las miradas huecas.
Recitar poemas que sepan a insultos
si tengo disgustos o groseras caretas.
Sonreír con grietas, como el niño jugando en la tierra,
correr bajo las estrellas
con el agua salada de cientos de guerras.
Y plantar bandera
como aquellos libertadores que cambiaron la era.