Me pregunto si mi enojo
va a consumirme algún día,
si la fuerza con la que siento
va a asfixiarme,
y todos esos secretos guardados
saldrán a la luz.
La comodidad en la que viven,
y el hogar que han creado en mi alma,
aun cuando siguen escondidos,
parece una burla
que solo invalida todo lo que soy.
El arrebato les ofrece
un espacio para existir,
mientras que reduzco a cenizas
todos los pilares que construí
para mantenerme de pie,
frente a las llamas
que yo misma provoqué.
Veo la oportunidad
de tener libertad.