Se que te voy a querer
hasta el final de mis días,
no en vano te merecías
cuanto te pueda ofrecer.
Me quisiera merecer
tu respeto y dilección
intrínseco a la relación
para cumplir mi deseo
de poder ser tu Romeo,
amándote con devoción.
Desde ahora hasta el final
no te dejaré de amar,
dispuesto a jerarquizar
mi vida sentimental.
Tú serás lo primordial
ante cualquier otra cosa,
pues no hay mujer más hermosa
que la que tengo a mi lado,
ella es quien me ha regalado
mi vida maravillosa.
Classman