William26🫶

A Veces la Fortuna Se Disfraza

A Veces la Fortuna Se Disfraza
por Wii

 

Y yo no te merezco.
Lo murmuro cada vez que respiras
junto a este costado imperfecto,
como si el universo hubiese errado
al cruzar tu destino con el mío.

Tal vez fuiste víctima
de una broma cruel del destino,
una apuesta entre dioses hastiados
que decidieron castigarte
arrojándote a mi sombra rota.
Y sin embargo… te quedaste.

Pero esta noche —
te vistes como un eclipse
que no se puede mirar sin arder.
Y al verte cruzar la habitación,
supe que fui testigo
de un milagro que aún no se arrepiente de mí.

Tus ojos —nidos de fuego lento—
me encerraron sin violencia,
me ofrecieron la celda más dulce,
donde el amor no suplica,
porque ya se sabe condenado.
Y yo, prisionero voluntario,
susurré mi condena como plegaria.

Aquí estoy,
culpable de adorarte
con todo lo que no poseo,
bendecido por tocar
lo que jamás pedí en voz alta,
pero siempre invoqué en lo oscuro.

Si esto es castigo,
si esto es error o burla divina…
que el cielo me condene
a repetirte eternamente.

============================

Que seas feliz, es mi deseo
de Wii

No,
no te deseo ruinas ni tormentos,
ni que el amor te niegue sus jardines,
ni que el silencio ahogue tus intentos
de hallar consuelo en otras raíces.

No quiero que camines con la pena
como un ancla atada al alma rota,
ni que la soledad, esa cadena,
te haga olvidar tu risa más remota.

No quiero que la vida te castigue,
ni que el tiempo se ensañe con tu piel,
ni que la ausencia de mi voz te obligue
a mendigar cariño en otro edén.

Te deseo paz, un mundo sin heridas,
un sol que te despierte sin temor,
que logres los anhelos de tu vida
y el universo baile a tu favor.

Pero…
sí anhelo que un día, sin aviso,
me mires como nunca me miraste,
con un temblor de culpa en tu sonrisa
y el alma hecha ceniza del desastre.

Que sientas, por un breve parpadeo,
que fui más de lo que tú comprendiste,
que en mí dejaste un eco, un agujero,
y que lo bello fue lo que perdiste.

Solo entonces, sin rencor ni drama,
podré, de frente, mirarte a los ojos,
y aunque aún me tiemble un poco el alma,
seré yo quien diga… \"adiós\", sin enojos.