Roberto D. Yoro

ÁRBOL ASTRAL

ÁRBOL ASTRAL

 

En la cima de un suspiro giratorio,

nació un árbol con raíces de estrella,

su savia era tiempo derretido,

y sus hojas, relojes sin manecilla.

 

Cantaba luz con lengua de humo,

las ramas escribían oráculos al viento,

y un búho de fuego dormía de pie

sobre un fruto que soñaba planetas.

 

Cada noche, el árbol caminaba

por constelaciones que aún no existen,

sus pasos dejaban ecos de galaxias

en los charcos del pensamiento.

 

Un pez con alas de espejo

le ofreció un corazón sin costillas,

y el árbol lo plantó en el firmamento

como un segundo sol de lágrimas.

 

Ahora llueve verso líquido,

y en cada gota, un mundo gira.

El árbol astral no tiene sombra:

él mismo es el sueño de su raíz.

Roberto D. Yoro