Antonio Miguel Reyes

La Mata, cuerpo vivo de salobre

 La Mata, cuerpo vivo de salobre

 

La Mata es piel de mar, voces oyeras,

de un pueblo que resiste entre la espuma,

que sabe del almendro y de la bruma,

y guardan su verdad como banderas.

 

Sus pinos son umbrales de otras eras

y el parque del Molino aún presuma

de tardes que en la plaza se perfuma

bajo el rumor de historias verdaderas.

 

Aquí el salinero dejó su rastro,

la arena es testimonio de los días,

y el viento habla en refranes del ancestro.

 

Pedanía que canta sin falsías,

La Mata es corazón raíz de castro,

y late con la sal de sus porfías.