Mantener la conciencia limpia
frente a un mundo que ennegrece
con su roce descompuesto
las verdades positivas,
requiere rechazar certezas
dictadas por politicastros,
funcionarios sin conciencia
y menestrales que arreglan
con manuales herramientas
las morales consecuencias.
Con la impaciencia insaciable
de mi libre raciocinio,
mi libertad escarcela
los pensamientos cautivos.
JOSE ANTONIO GARCIA CALVO