A donde gritar
cuando el viento con todo su estupor
te golpea en el rostro
A donde mirar
cuando las arenas de tu vida desierta no te permiten mantener la mirada
A quien escuchar
cuando el silencio no cesa en la desolación de la multitud
A dónde ir
cuando todos los caminos se vuelven impenetrables
Invitar a los sueños más profundo, es donde puedas ser ese que ya desconoces