(I)
\"El eco de medio siglo\"
Cincuenta inviernos de huellas
me dejaron alma en flor,
aunque hoy me duela el sol
y tus fotos, las más bellas.
Te llevaste las estrellas,
pero el cielo sigue en pie,
porque amarte fue la fe
que me sostuvo en la vida,
y aunque el alma esté vencida,
te bendigo donde esté.
(II)
\"Los caminos que cruzamos\"
Fue la vida un campo abierto
donde juntos caminamos,
nos herimos, nos sanamos,
y el amor nunca fue incierto.
Hoy que el tiempo está más cierto
y el adiós rozó mi piel,
siento un eco tan fiel
que me canta tu sonrisa,
como un soplo de la brisa
cuando el mundo duele cruel.
(III)
\"Lo vivido no se borra\"
Aún respiro los detalles
de los días compartidos,
los silencios entendidos,
los inviernos sin desmayes.
Tus “te amo” fueron valles
donde el alma descansó,
y aunque el alma se quebró
al mirarte ir tan callada,
fuiste llama bien amada
que la muerte no apagó.
(IV)
\"lagrimas que dan fruto\"
Te prometo que este llanto
no será un hogar eterno,
que aunque el duelo sea invierno,
hay detrás del gris un canto.
Lloraré, sí, pero en tanto
me levanto a respirar,
te volveré a nombrar
con la risa y no el quebranto,
porque amarte fue mi manto
y en tu amor supe volar.
(V)
\"Lagrandeza de tu amor\"
Fuiste luz de cada año,
fuiste calma, abrigo, abrasa,
la ternura que no pasa,
mi refugio en cada daño.
No me guardo desengaño
ni reproches por tu adiós,
porque fuiste más que voz,
más que cuerpo, más que abrigo:
fuiste el todo, fuiste abrigo,
fuiste estrella, fuiste Dios.
(VI)
\"Promesas\"
Hoy susurro a los luceros
las promesas que sellamos,
y en los sueños que forjamos
todavía somos sinceros.
No hay relojes ni agujeros
que me borren lo vivido,
ni este pecho adolorido
te reniega de su pecho,
yo te escribo y satisfecho
doy por siempre lo ofrecido.
(VII)
\"Cuando el amor se hace eterno\"
Que me quede tu semilla,
tu perfume, tu mirada,
la caricia prolongada
de tu amor que no se humilla.
Fuiste reina, flor, orilla,
mi verdad, mi hogar, mi fe.
Y si un día yo no esté,
si mis pasos se disuelven,
que estos versos te revuelven:
¡te amé tanto… que aún te amé!