Nalia

Tic Toc

Tic toc, el sonido del reloj,

marcando lento el paso de este amor.

Susurra el tiempo, viejo traidor,

que aún no basta todo lo que te doy.

 

Cada segundo te nombra en mi piel,

cada minuto te canta en mi voz,

y aunque la noche se venga con hiel,

mi corazón late a tu son.

 

Recordando, una vez más,

cuánto amor te he de dar,

aunque el reloj siga sin parar,

yo te amo en cada tic y cada toc sin cesar.

 

Porque el tiempo no me puede robar

las promesas que no dejo de soñar,

y aunque el mundo se atreva a cambiar,

mi amor por ti nunca dejará de sonar...

 

Tic toc... tic toc...

mi alma, contigo, quiere estar.