Como las olas besan las orillas del mar
dejando la humedad a su paso
así tus besos endulzaron mis tardes
de aquel postrero y frío invierno.
Pasaron las grullas enamoradas
buscando un nuevo verano
pasaron los días y el sabor de tus besos
llenaron de luz el cielo encapotado.
Aquellas calles desérticas y solitarias
se alegraron con tu dulce sonrisa
llenaron de ecos sonrientes
la tarde llorona y envidiosa.
Han pasado mucho tiempo
los marzos se hicieron eneros
y el sabor de tus besos
se ha ido borrando de mis labios.
Vuelve a besarme amada mía
llena de fragancia mis áridos labios
haz que renazca la sonrisa en mi alma
vuelve a sembrar en mí el amor y la pasión.
Lima, 2 de julio del 2025
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