Tu mirada,
hipnotiza a mi alma como un hechizo suave,
y en tus labios, dulces, sabor a amor,
encuentro el principio de todo.
Tus manos,
capaces de hacer perder mi razón,
encienden mi corazón
con solo rozar la piel de mi universo.
Cuando te toco,
viajo más allá del tiempo,
a un rincón donde nuestros átomos
se entrelazan sin final.
¿Será el hilo rojo de las almas unidas?
¿O tal vez el misterio del entrelazamiento cuántico?
Sea como sea…
sé que estamos destinados a encontrarnos.
Y si el destino me dejara empezar otra vez,
si hoy fuera la primera vez que te viera,
volvería , sin dudar,
a enamorarme de ti.