RAPSODIA PARA DOS
Podríamos, tal vez, hacer un dueto
solamente para entre/tenernos
una melodía a dos voces y una letra
que evoque nuestras profundas pasiones
como trovadoras que coinciden
en un tiempo concreto de la eternidad
por ejemplo, se me ocurre, que acaso
acompasemos las respiraciones
sincronicemos los gemidos y jadeos
al compás de nuestros corazones
siguiendo fielmente la partitura
escrita en la piel de anhelados deseos
una melodía armónica y coordinada
donde no desafine ni una nota
en el dulce cantar del amor con/sentido
quizás acompañada de una danza
envuelta en cómplices caricias
cuando sobre mí, tú a horcajadas
descargas la sutil voluptuosidad
mientras que mis manos tomando tus pechos
amortiguan la precipitación
de esos labios en caída libre
hacia mis labios predispuestos y atentos
para sostener el impacto suicida
de una pirueta tan acrobática
como temeraria y valiente
sin público que aplauda ni orquesta
ni quien dirija el libre arte improvisado
cuando en el apoteósico crescendo
la explosión sincronizada de la pasión
advierte al tramoyista una bajada de telón
la sala vacía clama a voces un bis
y nuestras artes entusiastas lo secundan.-