Desde la AFP hasta la compañía de seguros se armó la volá, con papeles y trámites pa’ todo arreglar, el certificado en mano, ¡ya está todo claro!, la pensión sube y el alma se llenó de farol.
La vida nos sorprende con regalos así, cuando menos lo esperas, llega lo mejor, un aplauso, un brindis, que viva la emoción, porque esta pensión ahora tiene otro color.
Así que celebremos con guitarra y tambor, con sabor a chacarera y buen humor, que la plata crezca y el corazón sonría, porque compadre, la vida siempre da alegría.