Empieza por la postdata,
el final del hechizo,
el cuento acabado…
Tal vez por la pretensión desmesurada,
gritando al mudo abismo,
sin miedo, pero con mente fragmentada.
El miedo y la taquicardia,
se exacerbó con el eufemismo,
aquella soledad de cada día.
Despertó con el olor a lluvia,
después de dar vueltas en la cama,
soñó que una nueva frase le venía.