PARECE MUY POCO
Estuvo toda una tarde noche solo
con ella. En principio, parece poco,
casi un mero accidente producido
por la fuerza impredecible de la casualidad,
pero anduvieron todo aquel tiempo juntos
y sin conocidos alrededor, por en medio,
mientras callejeaban por una ciudad vecina
de cuestas empinadas y empedradas
en dirección a una fortaleza gótica,
mientras intercambiaban miradas y conversaciones
fluidas sobre temas variados, que, algunas veces,
se interrumpían de pronto,
y se quedaban un rato en silencio, pero no mudos,
con la mirada al borde
de todo lo que les zurría por dentro,
de los asuntos más difíciles y con peor explicación.
Con momentos en los que habían llegado
hasta a cruzar los alientos
en los tramos más empinados
y estrechos de la ascensión.
Gaspar Jover Polo