Hoy besaré tus labios por última vez,
ausentes de ternura, de pasión.
Rozaré tu mejilla tibia de cartón piedra. Crearé el momento de tu aroma para no perderte mientras deslizo los dedos buscando los tuyos por el vestido azul,que tanto te gustó.
Sentiré tu cuerpo rígido por mis yemas.
Y acariciaré la mano que todo me dió.
No se entrelazarán como tantas veces, no habrá complicidad.
Y abriré los ojos para el último adiós, para guardar esa imagen indeseada que siempre me acompañará.
Hoy pierdo lo más querido, lo más amado.
Hoy empezaré a encontrarte por los rincones de nuestra casa y a buscarte entre las estrellas.