Raul Gonzaga

En pos de la eternidad

Cuál será nuestra misión
si a esta vida hemos venido,
que este templo, tan divino,
este sano y sin dolor;

luminoso, como un sol,
siempre muy limpio y tranquilo.
como el lugar más bendito
que nuestro Creador nos dio;

Él en silencio te llama,
y te indica cuál sendero
te conduce a la verdad;

sacerdotisa es nuestra alma,
un albo altar nuestro pecho
de un amor universal...