Vive siempre en la distancia
yo la miro desde lejos
con su falda remojada
y sumida en el silencio.
Y en su falda hay una barca
que sutil la mueve el viento
y se eleva cual montaña
simulando que es su pecho.
Qué será lo que yo miro
desde lejos, desde siempre;
qué será, querido amigo
qué respuesta usted provee.
Si descubre el acertijo
voy a darle parabienes.