La lluvia llena el vacío que hay,
entre palabra y palabra,
como la coma impostora,
disfrazada va fragmentando.
Impostor soy también,
un poco conmigo mismo,
casi una nada con el mundo,
¿qué resulta más difícil?
Decir adiós a todo, ciao, goodbye,
¿por qué no?, si la nota descalabra,
pierde el sentido del ahora,
y me va desilusionando…
Una risa no dice que todo va a estar bien,
pero tampoco llama al abismo,
entre mis términos me confundo,
y me dejo llevar por la contemplación… tan dócil…