J.M Aceros Bernal

Infancia

Imagina a los infantes

recorrer siempre por acá

los mismos lugares y tiempos

regando la semilla de sus corazones de almibar.

 

¿Qué es lo que nos queda?

¿Luego del inevitable crecer?

¿A dónde van esos sueños

de navegar por el altamar?

 

Imagina volver a ser un niño

vivir de amor y paz

con la consciencia en el alba

y el corazón en mamá y papá.

 

La vida en nubes de algodón

soñando en pura felicidad

en jardines de la humanidad

esperando el amanecer para jugar.

 

 

Durmiendo en un paisaje irreal

colgando de las estrellas, la luna y Dios

ambientes coloridos de inmensa faz

en primaveras eternas y llenas de amar.

 

Con los ojos llenos de colores unidos,

Las manos embarradas en pasteles y dulces

Babean azúcar y café; abrazan con intensidad

para contagiar la inocencia y felicidad.

 

Pobres aquellos niños que terminan corrompidos

por un mundo maldito, que jamás pidieron tener.

Añicos en sus cuerpos crecidos, consumidos por el mundo real

caídos en el suelo de la verdad, y un niño muerto yacerá.

 

Un verso le entregaré

y junto a él, volveré a soñar

volveré a volar y sentir

y yo igual, moriré al crecer.