karonte

\"El Peón y la Dama\"

Suelta la dama su perro,

con correa de cartón,

cree que el verso va sincero,

pero ladra sin razón.

 

Anda el peón por encargo,

no razona ni respira,

le dictaron cada halago

y hasta el tono en que delira.

 

Cree que es libre, y se enreda

en su trova de ocasión,

pero se nota la rueda

de su dueña en la intención.

 

La dama que no es tan dama

manda versos por encargo,

si el peón muerde con drama,

es porque obedece el pago.

 

No hay espada en tu palabra,

ni hay firmeza en tu postura,

si tu pluma solo ladra

cuando el amo te asegura.

 

Aquí no hay miedo, ni pleito,

solo versos que desnudan:

quien se finge en su derecho,

que no llore si lo juzgan.

 

La que no es dama ni reina

lo lanza como emisario,

pero el lobo no se inclina

si el peón viene ordinario.

 

No critico su camino,

ni su gusto por rimar,

mas si juega al desatino,

que se atreva a improvisar.

 

Yo también sé de medida,

de cadencia y de temblor,

pero escribo con mi herida,

no por hambre de un favor.

 

Habla mucho del que ataca,

mas recita sin pensar;

y si el eco lo destaca,

es por miedo a cuestionar.

 

Yo no insulto con alarde,

ni pretendo ser mejor,

pero al perro que no muerde…

lo acaricio sin temor.