_Receta fatal_
Amor freí,
sin precaución,
se me quemó
la bendición.
Puse un ají,
¡y era traición!
Le diste el sí
al espaguetón.
Te di sabor
con mi limón,
mas tu motor
fue un tostador.
Fuego interior,
sin dirección,
fue su fulgor
pura ficción.
Con perejil
te acaricié,
mas el perfil
no lo soñé.
Fuiste sutil
y te escapé,
como un barril
¡que no tapé!
Monté el pastel
de la pasión,
pero el laurel
fue decepción.
Mas tu nivel
de confusión
fue tan cruel…
¡que apagó el fogón!