Perséfone

Y no puedo...

Y como cada noche, no puedo dejar de pensar en ti,

En ti, que ni siquiera eres, ni siquiera estás, ni siquiera sabes...

Y no puedo.

Y como cada noche, no puedo evitar que mi mente te busque en cada sueño,

En cada suspiro, en cada deseo...

Y no puedo,

Y no quiero.