Actualmente tengo cien problemas
sin enumerar, solo un aproximado,
aprovecharía de remediar uno antes de pernoctar,
mi deseo de felicidad,
Mi alma de creación,
mis ansias de engendrar,
pero no,
solo soy un hijo que puede componerse cada día concebirme como un pedazo de algo mayor,
un observador muy observado,
esta situación da para remediar,
a pesar del juego,
de palabras,
y no esquivo,
responsabilidad,
solo que no supe acomodar,
las prioridades primero,
los hombres y los niños al final,
atrás de la fila,
últimos en la felicidad,
misterio en la agonía,
el premio mayor está
tras esa puerta, tras el sonido de maderas que golpea el viento sin tocar,
lo sé,
Que lo tendremos todo,
yo y todos mis yoes,
Sé que me oyen…