Rosendo Ruiz

Vaso infinito

La vida es

como un vaso de agua:

Neutro, útil, transparente,

compatible

con todas las sustancias

que puedas imaginar.

 

Ahora, podés beberla

como si fuera el café 

de todos los días:

Rápido, barato, sin sabor,

inexistente a la conciencia

y al tiempo mismo.

 

O podés hacerlo como

si fuera esa bebida, 

esa fruta, esa chica 

o esa vista que 

te vuelve tan loco.

 

Y a diferencia de esa 

copa voluptuosa 

y única de año nuevo 

que solo te da una

buena resaca y un

bolsillo vacío;

 

ese vaso de agua,

lúcida y sencilla

se vuelve a llenar

siempre y cuando

no lo tires por

el abismo.