Carlos Armijo Rosas...✒️
CITA A CIEGAS... ✒️
Eran mis primeras armas
en el mundo virtual,
buscaba yo una dama
que fuera muy particular…
No sé como llegué
a una página social,
de a poco me enredé
entre tanta cara y postal...
Hojeando caras y perfiles
la tarde de un viernes,
cuando en el pc sonó un timbre
era una amistad en ciernes...
Las preguntas de rigor
en este tipo de cacerías,
¿si había sido su visitador
y qué tal le parecía?...
Su fotografía volví a mirar,
para mejor responder,
no me fuera a equivocar
y la llegara a ofender...
Buenamoza es como te encuentro,
fueron mis primeras letras,
hasta ahí no era cuento
ya que aún no era poeta...
Nos pusimos a conversar
a través del famoso chat,
¿adónde iría a parar?
no me lo quería imaginar...
Nuestros respectivos trabajos
quedaban a zancadas un par,
con cualquier atajo
me podía yo escapar...
El fin de semana pasó rápidamente
y el lunes tomó su lugar,
ella no estuvo en mi mente
pues no tenía nada especial...
Llegué a mi oficina
y encendí mi computador,
venía de vuelta de la cocina
cuando una alarma sonó...
Una alerta de mensaje
del sitio de las amistades,
ella quería conocer el menaje
pues andaba por las vecindades…
Me invitó a un café cortado
muy cerca de su trabajo,
yo no andaba apurado
pero en un santiamén estuve abajo...
Fui el primero en llegar
y no fue por ansioso,
no me gusta hacer esperar
y si soy muy \"curioso\"...
La vi desde muy lejos
y mi corazón se asustó,
ni siquiera era un reflejo
de lo que de ella me gustó...
Nos saludamos de beso en la cara
y a Dios yo me encomendaba,
mi corazón estaba de para,
ella no era lo que esperaba...
Tomamos asiento y llegó un garzón
¿qué se sirven nos preguntó?,
yo sólo quería se calmara mi corazón
y con un café cortado me apuntó...
Rogaba al cielo que no preguntara
las interrogantes de rigor,
saber cómo yo la encontraba
ya me estaba dando pavor...
Pero lo inevitable si llegó
y la pregunta la lanzó,
¿cómo la encontraba yo?
y el café se me enfrió...
Siempre he sido muy diplomático
no me gusta herir a la gente,
jamás respondo en automático
debía decir algo...inteligente...
Te ves...diferente
fue lo que se me escuchó,
quizás era el ambiente,
pero mi respuesta no le gustó...
¿De cuando son tus fotografías?
fue mi forma de contraataque,
de diciembre ella diría
y ya era marzo en esta parte...
¿Cómo se podía cambiar tanto?
si eran unos pocos meses,
engordar como un marrano
y es que también se miente a veces...
Cuenta se dio que me desilusionó,
buscó la forma de desquitarse,
de mi estado civil se acordó
y por ahí surgió su ataque…
¿Así que tú eres casado?
“lo he dicho siempre”,
entonces estás ocupado,
“si es que así lo sientes” …
Entonces eres un infiel,
yo pensando que le decía,
se bebió de un sorbo el café
y se fue sin una despedida…
La verdad, eso me alegró,
ella misma me dio la salida,
hasta ahí aún existía un dios,
afuera continuaba la vida…
No reflexiones mi poesía...vívela