Cada vez que te decía te quiero
entraba en tristeza ,porque me
respondías con enojo y me decías
que yo no era hombre de altura para ti,
desde ese momento me propuse
a trabajar con esmero
hoy que ha pasado tanto tiempo ,no tengo
mucha riqueza para ofrecerte, pero tengo un techo donde puedo mirar la luna y verte pasar, ya no
presume de grandeza y desde mi
balcón veo tu caminar ya no luce
hasta tus encantos donde quedó
yo sigo sencillo y soy feliz en mi
casita gracias a tú desprecio mujer