\"JENNI, MI HIJA, UN TROCITO DE CIELO\"
Hija adorada, hija siempre esperada, siempre deseada, desde el preciso instante en que tus ojitos se abrieron al mundo.
El tiempo ha pasado... La beba, la niña, la adolescente quedaron atrás...
Eres ya una hermosa y talentosa mujer, hija querida, un trocito de cielo que el Creador me obsequió.
Jenni, Jenni, Jenni... eres realmente increíble, cada paso que tú das, es luz que ilumina y nos recorre a plenitud.
Ojos de cielo profundo, suavidad en tu mirada, inmensa paz y transparencia en tu rostro.
Con esfuerzo has alcanzado las metas más increíbles que, por cierto, nos han llenado de sublime orgullo.
Has caminado por la vida y la has hecho tuya, atesorando cada paso transitado.
Hija querida, mi Jenni del alma, corazón latente, trocito del inmenso cielo.
No cambies, sigue creciendo, alcanza lo que te has propuesto... El Universo entero es tu único límite.
Jenni, eres mi hija amada, un trocito de cielo.
Roberto Bardecio Olivera
(19/6/2025)