Gibraltar

Samanta

Samanta

Con un nudo en la garganta
que duele y me deja mudo,
y mi corazón desnudo,
esta angustia me atraganta.
Me abandonaste, Samanta,
por no escribir un buen verso,
si soy un simple converso,
no escribo en oro y papel
ni siquiera en oropel.
Tan solo soy un perverso.

De mi libro: Anarquía Humana