En estos tiempos perversos
donde al honrado se aparta
y se eleva al indecente,
donde se pena el esfuerzo
y al que se esfuerza se humilla,
donde cobra la desidia
subvenciones de refuerzo,
ser honrado, ser decente
y esmerarse en esta vida,
se paga con calderilla.
JOSE ANTONIO GARCIA CALVO