He atravesado cortinas de humo una
y otra vez.
Pero solo después de pasar una ha habido fuego.
El fuego me ha herido, me ha lastimado, me ha quemado.
Me ha dejado cicatrices que me cambiaron por completo.
Ha dejado su marca imborrable e inigualable.
Me ha hecho retomar todo desde los escombros.
Edificando todo de nuevo.
No ha sido tarea fácil.
Y las cortinas siguen apareciendo.
Yo sólo trato de atravesarlas con sumo cuidado.
Aunque mi cautela no me librará del fuego