¿es mejor morir o hablar?
¿pero qué pasa si morir es lo que quiero aunque hablar es lo que debo?
porque tengo un nudo en la garganta que me va a aplastar,
me va aplastar porque hablar es lo que necesito,
aunque al hacerlo me rompe en pedacitos,
un pedazo de mi cara,
otro de mi alma,
ambos juntos tendidos en mi cama,
porque hablar no arregla nada,
o eso quiero creer,
porque tengo miedo de hacerlo y luego ver que no había nada a lo que temer,
que el habla nos protege de la muerte,
la muerte interna en la que acabamos por querer ser fuertes,
por no molestar a la gente,
porque cuando hablo,
molesto,
y para no molestar he escrito esto,
porque cuando escribo,
no hablo,
y lo que no hablo,
lo pienso,
y el pensar es lo que duele tanto,
las palabras en mi garganta me están ahogando,
por precipitarse fuera de mí están luchando,
pero no las voy a dejar salir volando,
sí el no hablar me esta matando.