Laura Meyer

El poder de tus labios

Tus labios rojos carmesí activan en mí lo que otros no lograron,

sin entretejer nuestros cuerpos, sin darnos un beso, estoy exaltado.

¡Benditos labios de fuego, que me seducen y lascivan mi estado!

Y, aún sin devorarlos, mi palpitante corazón se acelera a cada rato.

 

En estos momentos, solo puedo imaginar cómo sería humedecer tus labios,

pero algún día recurriré a tu mejor arma, para no permanecer provocado.

 

Laura Meyer