Invisible amiga,
lascerante herida,
dolor que no cesa ,
continuo pesar,
reinas por la noche,
te ocultas de día,
juegas con el tiempo
pero no te vas.
Y son tus minutos
de angustia infinita
con los que tu juegas
tus cartas y más.
Hurgas de repente
y sin previo aviso,
simulas momentos
del pasado y ya.
Deja que el recuerdo
transforme mi vida,
que sigan mis pasos
hacia otro lugar,
que encuentren mis ojos
la senda marcada
y logre mi alma
de nuevo la paz…