crisantemo

Recuerdos de aquel verano ( coplas de pie quebrado o Manriqueñas)

Ya muestra junio el tesoro

de una tierra cuna y lecho,

tradición.

Fruto sois espigas de oro

de reposado barbecho

y oración.

 

Teme la vega la fragua

que da a la tierra mortaja,

serpentea,

como una culebra de agua,

la dulce y preciada alhaja

de la aldea.

 

Los chopos de la ribera

soportan el áureo manto,

y las flores,

en esa penumbra austera

anuncian en triste canto

mal de amores.

 

Quedaron bajo sus ramas

palabras, que sin testigos,

se dijeron,

y ardiente pasión en llamas,

y besos que dos amigos

no se dieron.