Maxi Aristarán

Extraños en casa

En la casa común, dos almas solas,
bajo el mismo techo, extraños ahora.
Un silencio glacial que lo devora
todo, cual sombra que las luces roba.

Las risas de ayer, cual eco lejano,
resuenan fantasmas en la memoria.
Tu mano, antes refugio soberano,
es hielo que me cuenta otra historia.

Compartimos paredes y jardines,
mas somos dos islas en la tormenta.
Dos náufragos sin brújulas ni fines,

viviendo una cruel y amarga afrenta.
En esta cárcel de recuerdos fines,
¿cuándo hallaremos la paz que se ausenta?