Tus labios, tus mejillas, tu piel de doncella,
tus ojitos claros, tan dulces estrellas.
Tan bonito como el mismo cielo,
tanta belleza en tu luz y anhelo.
Tus ojos y piel, fragancia de rosa,
que envuelve mi alma, sutil y hermosa.
Me enloquece el alma, mi pecho suspira,
para nunca alejarme, en
el tiempo.