Con su divina silueta
de piel moruna;
hace que fluya en mis venas
de amor la lluvia.
Con su mirada tan tierna
dulce y profunda;
siento de Dios su grandeza
mística y pura.
Ella es la fuente mas fresca
donde mi pluma
su sed de versos abreva;
para que surjan
poemas que raudo vuelan
y su alma arrullan.
Autor: Aníbal Rodríguez