Estuve ahí, cuando las penas se transformaron.
Estuve ahí, cuando el dolor fue inabarcable.
Estuve ahí, cuando las lágrimas se volvieron rojas.
Estuve ahí, cuando los glaciares se despedazaron.
Estuve ahí, cuando el búho se convirtió en erizo.
Estuve ahí, cuando de la desesperación se deshizo.
Estuve ahí, cuando las estrellas nos miraron.
Estuve ahí, cuando la luz se deformó frente a ti.
Estuve ahí, cuando dijiste casi en un suspiro:
<Ya no soy lo que era antes,
Y vos ahora sos mi semejante>
Estuviste ahí, cuando te miraba sin saber por que.