Dr. Salvador Santoyo Sánchez

CARMÍN

Yo la miré, sin conocer,

de sus labios el hechizo,

como un rojo bebedizo,

rojo carmín de placer.

 

Ron, el sabor de su boca,

sus palabras aguardiente,

rosa lengua tras sus dientes,

un te quiero, que provoca.

 

En su pelo la fragancia,

cascada de mujer buena,

con una trágica infancia.

 

De una embriaguez tan serena,

vende amor sin importancia,

su belleza es pena ajena.

 

¿Sí feliz, desea ser?

¡tendrá que volver a nacer!

Todos los derechs reservados.

 

Dr. Salvador Santoyo Sánchez

26/Mayo/2025