Ariel Wigodski 🇨🇱

Ecos y Silencio

Hablamos con voces cruzadas,  palabras que se pierden en la bruma, ecos que rebotan en muros invisibles,  y el alma queda atrapada en el ruido.

El silencio cae como una pesada cortina, donde el eco de lo no dicho se hace dueño, un espacio frío, un tiempo detenido, donde la distancia crece sin remedio.

Pero en ese mutismo, lento y profundo se abre una puerta hacia la calma, un suspiro que disuelve las sombras, y el corazón aprende a escucharse a sí mismo.

Entonces, sin prisas, sin temor ni ira, la paz llega como un río sereno, que limpia heridas, que une caminos, y hace del silencio, un lenguaje de amor.