marco romero

Eros Noche

Eros Noche 

 

Y pensar que pudiste tomarme de la mano

y acariciar mi alma

con el milagro de tu palidez dormida,

con la blanca rama de azahar

y la luz de un sol ficticio,

con la íntima voz de tu mirada

y la suavidad de tu tez,

de turbada flecha.

 

Y pensar que pudiste quitarme la infancia

con tus labios, relámpagos de la vida,

desfile de erotismos, cantos y reprobada llama.

 

Eras la noche, manto de sombras que dura,

y yo la luna, pálida y enamorada,

en un abrazo de sombras,

sed que tortura la garganta sedienta,

fruta prohibida y amada

en la espesura de tu Edén.

 

m.c.d.r