Donde la memoria sangra
El subconsciente insiste
en volver a ese lugar,
donde el corazón, herido,
prefiere no regresar.
Aunque el alma lo disimula
y lo intenta sepultar,
los recuerdos, como sombras,
van y vienen sin cesar.
Y en la quietud del alma,
cuando parece olvidar,
la memoria, implacable,
no deja de sangrar.
Laura Meyer