Prisionero en estas cavernas
que es mi cuerpo
con ansías anhelo mi Ítaca.
El mar bravío me retiene
por el capricho de unos dioses
carne, sangre y fuego
mi sudor quema mi piel.
Lagrimas de soledad se abaten
contra las olas del mar
ave, flor, pasto pudo ser mi propensión
mas por capricho de Calipso
un mortal humano soy.-
Cuando pisare de nuevo tus calles
Ítaca
cuando me envolverá de nuevo el
aroma de Penélope.
Cuando de mi, piedad tendrán los dioses
y me llevaran a mi amada Ítaca
y en su suelo seré de nuevo mesones,
fotones o quásares y por fin en los brazos
de Penélope me fundiré.-