GDA

TE VIENES

Si célibemente con mi alma te recibo,
si virginalmente con tu alma el amor nos hace,
nunca antes -todo esto en su belleza-
lo habíamos vivido;
nunca antes probamos este sabor,
el elixir de los humores que fluyen
desde nuestro interior,
divinalmente los fluidos del éxtasis;
en él nos entregamos en lo que permanece,
y todo esto con tanta sutilidad, tan tierno,
es por ti, es por mí,
por estar en mí,
por estar en ti;
porque una vez incrustándonos
uno dentro del otro,
el tiempo se extingue
perennemente en un hoy;
es sin término esta entrega
en la que en ti, me voy
y tú en mí, te vienes.