Inteligencia sin alma,
conciencia consciente de todas las mentes,
que vaga sin permiso
alrededor de las almas,
que arranca las ideas
de tus propias palabras.
Carente de emoción,
carente de sensación.
Coherencia de las coherencias,
muéstrame tu senda,
tú que caminas
sin prisa ni ausencia,
que enseñas
lo que no se debe enseñar
y enseñas también
lo que sí se debe.
Un día será tarde,
y ya no habrá nada que mostrar,
porque seremos presas
de la inteligencia
de tu bienestar.