Hoy pensé con sagrada devoción
ayer soñé con alterada imaginación
mañana seré un estancado, perturbado
resentido, marginado y estimulado
ladino
No comencé una guerra por aventurada
y soñolienta censura de tú valía
meses de indesiciòn dando origen
a la inmersión del alma en tú imaginación
Serás solamente un puñal en mi vientre
dispuesto a desencadenar la ingenuidad
y destronar de tú imaginación toda la devoción
de un sentido perdido.