Siempre al borde del abismo
Con manos y pies cansados
Almas se agrupan de a dos
Yo solo conmigo mismo
Vanidad y egoísmo;
Lamentos que viajan rápido
Los males que ya encarnados
bailan con la muerte al ritmo
Sin consuelo ni cobijo
Sin pasión ni un gran amor
Me cuestiono este acertijo
Hoy, yo me enfrento al temor
Y de todo mal me alejo.
Vuelvo a sentir el fervor