Navega frente al viejo hotel,
buscando espejo de respuestas,
hundiendo la nostalgia viva
bajo pesadez de sábana a cuestas.
Eco de gritos livianos,
ahogan el intento de olvido,
suspira tomar las frías manos
de aquel espectro lejano.
Sostiene recuerdos al peso,
creando agujeros inertes,
arrancando aquel efímero beso
en velo de días inciertos.
La sábana se doblega marchita,
flotando en lágrimas vacías,
fantasma ha de nombrarse
sepultado por versos de \"amarías\".